La carne de pollo es una de las favoritas entre niños y mayores. Además de ser fácil de masticar, su suave sabor permite prepararla de mil maneras. Hoy en Carnicerías Herrero os explicamos diferentes formas de cocinar pechuga de pollo. Porque en la variedad está el gusto.

Mucha gente asocia la pechuga de pollo a las dietas. Por eso, el primer cocinado que les viene a la cabeza es la plancha. Sin embargo, hay vida más allá de la pechuga a la plancha.

Formas de cocinar pechuga de pollo

Si optáis por la plancha, hay trucos a tener en cuenta para que  la pechuga quede perfecta: cómo ablandarla, marinarla y cocinarla.

Otra de las formas de cocinar pechuga de pollo más extendidas es el empanado. Resulta muy atractivo para los más pequeños y permite jugar con el contraste del crujiente.

También es posible cambiar el clásico empanado de pan rallado por otros más originales y que aporten un toque diferente. Por ejemplo, con cereales o frutos secos.

Similar al empanado, pero con el plus de un jugoso relleno, está la pechuga Villaroy. Una delicatessen que combina la pechuga de pollo con una salsa bechamel, todo ello empanado y frito. ¡Tienes que probarlo!

En la misma línea están los Cordon bleu de pollo, que constan de dos filetes finos de pollo rellenos de jamón york y queso. Posteriormente, se empanan y se fríen.

Dejando los empanados a un lado, la pechuga de pollo también se puede preparar rellena. Aquí la imaginación es el límite, aunque se suele rellenar de verduras. Una vez rellena, se puede cocinar al horno, guisada o envasada al vacío.

Por otro lado, los amantes de las barbacoas disfrutarán comiendo la pechuga a la brasa. La única precaución es no hacerla en exceso, para que no se seque.

También para la barbacoa tenemos nuestros deliciosos pinchos de pollo con adobo andaluz, que aunque están hechos de contramuslos, merece la pena probarlos.

Una alternativa diferente, divertida y fácil de comer pollo son las hamburguesas de pollo. En Carnicerías Herrero contamos con variedades tan ricas como la original de pollo, burger de pollo con queso y burger de pollo con verduras.

Finalmente, la pechuga de pollo se puede tomar guisada. Las salsas le aportan una jugosidad increíble y se puede jugar con muchísimos sabores diferentes.