En los últimos años, las carnes maduradas se han colado en los hábitos de consumo de los amantes de las buenas carnes. Sin embargo, como suele ocurrir, pronto aparecieron detractores que decían que eran nocivas para la salud. Hoy en Carnicerías Herrero desmentimos esto, explicando por qué la EFSA afirma que las carnes maduradas son seguras para su consumo, siempre que se cumplan determinadas condiciones.

Las carnes maduradas son seguras para su consumo

Todos los alimentos frescos deben llevar un riguroso y estricto control sanitario desde el primer momento hasta que llegan al consumidor.

No obstante, cada cierto tiempo aparecen opiniones que intentan menospreciar determinados procesos. Es el caso de las carnes maduradas, cuya seguridad se puso en entredicho.

Sin embargo, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha publicado recientemente sus conclusiones al respecto, basándose en un completo e interesante informe.

Primeramente, cabe diferenciar entre el proceso que llevan las carnes frescas frente a las maduradas. Estas últimas cuentan con un proceso controlado más largo que las carnes frescas, en el que las propias enzimas y microorganismos de la carne actúan descomponiendo su tejido conectivo. Gracias a este proceso, la carne se vuelve más blanda y los matices y sabores se acentúan.

Ahora bien, para que sea un proceso seguro, debe realizarse en las condiciones óptimas que permitan que la carne madurada sea segura para el consumo humano.

En el caso de la maduración en seco, la carne debe madurar hasta 35 días manteniéndose a una temperatura de 3ºC o menor. A temperaturas mayores, podría proliferar moho, que produce sustancias nocivas para la salud.

Así, si se mantienen las condiciones adecuadas, las carnes maduradas son seguras para su consumo, además de un bocado delicioso, al igual que las carnes frescas.

En Carnicerías Herrero apostamos por la calidad de nuestras carnes, ofreciendo a nuestros clientes siempre los mejores cortes. Esto se traduce en una total garantía de satisfacción.